Monday, July 18, 2016

DE SER VERDAD LA PRESENCIA ET ¿HACIA DONDE DEBEMOS DIRIGIRNOS CULTURALMENTE?



DE SER VERDAD LA PRESENCIA ET: ¿HACIA DONDE DEBEMOS DIRIGIRNOS CULTURALMENTE?

Por Giorgio Piacenza





IMAGEN DE LA GEIPAN (Del Centro Nacional de Estudios Espaciales de Francia): SON SUS ESTADÍSTICAS sobre sus estudios de FAAs o FANIS u OVNIS:
FENÓMENOS PERFECTAMENTE IDENTIFICADOS 16%
FENÓMENOS PROBABLEMENTE IDENTIFICADOS 34%
FENÓMENOS NO IDENTIFICABLES 37%
FENÓMENOS (claramente) NO IDENTIFICADOS 13% (Entre estos un 2% tiene muchas evidencias que se suman entre sí indicando una verdadera anomalía). 


¿Serán un 30% o un 1% de los avistamientos reportados objetos de origen inteligente no-humano? Debemos tomar como la mejor cifra el 21.5% de objetos “NO EXPLICADOS” que la Fuerza Aérea Estadounidense dio como cifra en su reporte Número 14 a través del “Proyecto Libro Azul”? En teoría bastaría que un solo evento FAA (de entre los miles que se detectan anualmente en el mundo) sea de origen no humano para que sus implicancias sean enormes desde el punto de vista cultural.


Pregunta: ¿Vale o no vale la pena investigar los FAA "Fenómenos Aéreos anómalos" si es que incurren en el espacio aéreo de las naciones? ¿En vez de perseguirlos casi inútilmente, tratar de evitarlos, negarlos, suprimirá los que realmente ni parecen de la Tierra ni naturales…¿por qué no mejor tratar de interactuar con ellos?  Han sido fotografiadas formas elipsoides discoidales y variantes iluminadas o con apariencias metálicas por lo menos desde los años 20' del Siglo Pasado y existiendo cientos de testimonios (de militares y personas serias y fiables), no solo de avistamientos de "lucecitas" sino de objetos metálicos estructurados que a veces interactúan con personas o lugares; habiendo documentos desclasificados sobre el tema y hasta interacciones con bases nucleares y muchas personas sencillas y encumbradas alrededor del mundo...


¿Por qué la mayoría de los científicos y de los líderes culturales y religiosos prefieren hacerse la “vista gorda” e ignorar la situación?


¿Somos por naturaleza tan pusilánimes?  ¿O es que SIMPLEMENTE ESTAMOS MANIPULADOS POR “GRANDES INTERESES” pero – en el contexto integrativo – solo enfatizar de forma agresiva (y regresiva) una oposición “anti elite” sería derrotista porque en el fondo nos mantendría dentro del mismo pensamiento excesivamente dual con el que funcionarían los mismo beneficiarios de aquellos “grandes intereses”. Y ese pensamiento permitiría  que segmentos billonarios, corporativos, financieros, militares, de inteligencia ultra secretos (oficialmente inexistentes) “manipule” (y probablemente sean manipulados)  manteniendo un nivel de conciencia  inadaptado a la complejidad y transdimensionalidad como aquel nivel que diariamente genera una infinidad de escándalos y divisiones excesivas en política, la tentación del crimen, la corrupción, así como un individualismo hedonista o exacerbado en la pertenencia tribal propagado por imágenes de entretenimiento “basura” junto a la globalización materialista neoliberal a nivel mundial.



¿Será que estamos genéticamente bloqueados o con lastres que nos limitan al mecanicismo materialista clásico como premisa fundamental preconsciente bajo el cual experimentamos la realidad y la vida? O será nuestros buenos líderes - una vez que llegan al poder – decaen porque, “otros” o  “el sistema” los absorbe?


70 AÑOS y + de estudios serios, testimonios, interacciones directas, muestras anómalas de terreno luego de aterrizajes, posibles implantes analizados y con características anómalas, fotografías y filmaciones analizadas y verificadas y los testimonios de algunos astronautas, pilotos, políticos y militares ¿no significan NADA o en todo caso muy poco? ¿Será porque (más allá de nuestros apegos sociales a las teorías que usamos y a algunas epistemologías) las implicancias de una presencia extraterrestre no encajan con lo que fundamentalmente e implícitamente creemos de forma intuitiva y automática acerca de lo que es la "realidad" (o como DEBE ser esta realidad)?


Pero, por necesidad de saber, de sobrevivir y de contrarrestar la disonancia cognitiva que se genera al contar con mayores evidencias, ¿creceremos hacia un universo cultural y práctico más amplio finalmente aceptando que la realidad física que experimentamos realmente funciona en base a una más prioritaria y subyacente INTERCONEXIÓN Inteligente y coherente que es interna a la materia?



Un cambio de actitud mundial o "cambio de conciencia" realmente útil y adaptativo sería equivalente a superar esa percepción intuitiva, posiblemente psico-biológica e innata así como sentimientos y emociones basados en una adaptación a lo que parece ser un mundo solo regido por la física clásica con una separación espacio temporal predominante y la desconfianza entre los seres conscientes basada en vivir bajo esa desconexión.

El cambio personal y cultural para poder interactuar más inteligentemente entre nosotros y con otras formas de vida, incluyendo a visitantes extraterrestres, sería sumamente ÚNICO  y FUNDAMENTAL en la historia y el desarrollo de la humanidad actualmente viviendo sobre la “piel” de Pacha Mama; en realidad sería algo equivalente al nacimiento de un NUEVO tipo de SER más humano que, de no ser desplazado por la automatización o por dictaduras mundiales tecnológicas que impondrían un falso orden de forma coercitiva, podría ser verdaderamente más sabio y HUMANITARIO.


Y si PARA SOBREVIVIR como especie tenemos que lograr superar esa sensación básica, pre-verbal de desconexión, probablemente sí se pueda y esté en nosotros el potencial necesario para lograrlo. La interconexión implícita en los fenómenos psíquicos parapsicológicos que trascienden los límites del espacio-tiempo apuntan a eso.

Reconozco como un deber ético empezar a informar a la población sobre lo que está pasando, sobre meta teorías y descubrimientos empíricos y científicos que son parte de esta conexión intrínseca. La apertura de conciencia basada en el sentimiento debe estar acompañada de una meta teoría en verdadera armonía con esa apertura. Es muy importante movernos más explícitamente en esa dirección...primero sin prolongar indefinidamente la negación de una realidad concreta, aquella que - razonablemente hablando – indica que por lo menos ALGUNOS FAA, FANI u OVNIS pueden muy bien ser de origen inteligente no humano regidos por una ciencia que supera justamente esa intuición de desconexión que nos limita al mundo físico clásico. Sabemos que la existencia de esta probabilidad por lo menos, no fue negada ni pasada por alto en la conclusión del "INFORME COMETA" proporcionado por una comisión investigadora cuasi oficial en Francia.


Si fuese verdad que algunos de nuestros líderes transnacionales ocultos saben de esto (como ciertamente así parece) y que operan manteniéndonos en una ya insostenible ignorancia para evitar el caos social, ¿qué llegará primero y qué sería peor?  ¿El caos debido  una súbita revelación de la presencia extraterrestre o el irreparable caos y/o la deshumanización global en aras de la seguridad bajo una dictadura mundial tecnificada debido a que nos regodeamos en la ignorancia o porque no llegamos a adquirir mejores fundamentos culturales para adaptarnos a un mundo de universos interconectados que primariamente funcionan de forma post racional (en el sentido de “post-binario”) y post intuitiva (en el sentido clásico)?


Ya debemos RECONECTAR nuestras epistemologías con los FUNDAMENTOS RELACIONALES de las SABIDURÍAS ANCESTRALES y con meta teorías integrativas actuales que no solo son posmodernas ofreciendo un nuevo derrotero sino que son integrativas, complejas y transdisciplinarias.  Y la teoría que acompañe a una empatía o sentir más conectivo e inclusivo puede ayudarnos a explicar y a explicarnos a nosotros mismos más adecuadamente con la intuición que realmente existe una unidad de conocimiento o principios integrando (sin violentar) a la diversidad. Esto permitiría que el SENTIR  de fraternidad, de mayor inclusión, respeto y vínculo entre todos los seres este acompañado de una ideología apropiada.

¿Será que estos posibles seres inteligentes no humanos se "trasladan" o son parcialmente interactivos con nuestro "pacha," o con la realidad de nuestra existencia presente, practicando científica, tecnológica y vivencialmente una forma parecida al "Tinkuy" y al "Yanantin" andino?  ¿Cómo logran el vínculo físico parcial o total entre realidades o superando (desde un punto de vista clásico) distancias tan vastas?


Me parece muy obvio el vínculo que ya existe entre la muy probable presencia de otras inteligencias avanzadas “visitándonos” (ya algo prácticamente demostrado a entera satisfacción de forma racional objetiva si uno adiciona las mejores evidencias) y los cambios de paradigmas y sus bases epistémicas fundamentales que necesitamos. Ellos superaron la separación que es fundamental que nosotros aprendamos a superarla culturalmente o inter subjetivamente y en nuestro interior para lograr vivir bien en un mundo más complejo, entrelazado, interconectado, cuyos componentes son mutuamente sensibles e interdependientes prácticamente interactuando coherentemente como una inteligencia auto organizativa. Es parte cardinal de lo que necesitamos RE-CONOCER. Re-conocer como “natural” dentro de una versión más evolucionada, inclusiva e integrativa de nuestra "avanzada cultura civilizada occidental", reconocer directamente y sin tapujos el encuentro y nuestra relación con otros seres que también son “otras personas con otros cuerpos”, otra “gente” a las que las podemos llamar “tu” así como se pensaría en algunas cosmovisiones andino-amazónicas por lo expuesto según la antropóloga Luisa Elvira Belaúnde y otros.

Ya es tiempo de dejar de pensar que “estas cosas” son “una locura” o que no se deben hablar en voz alta, especialmente entre gente “seria” o en ambientes académicos e "ilustrados". “Locura” es seguir tan desconectados de lo la evidencia y de lo que está pasando a tantas personas siendo la acumulación de todo esto tan sugerente. Lo cuerdo (y esto se refiere a ir directamente al corazón) es recordar nuestra relación personal con toda la Vida y con nuestros orígenes más profundos. Ese vínculo subjetivo y simultáneamente energético post-cuántico nos conectaría entre realidades físicas y no físicas.


Creo que hoy tenemos dos opciones básicas: Mantener el estatus quo cada vez más caótico y disfuncional o llegar a una etapa de conciencia organizativa de mayor vínculo o relación que distingue pero entreteje inseparablemente a lo subjetivo y lo objetivo.


Es algo muy distinto a todo lo que hemos sido antes, pues aun en los pueblos originarios pre-modernos que podrían cómodamente aceptar las multi-realidades, la tribu y no la humanidad era prioritario, así como en muchos casos era prioritario mantener contentas a las “deidades” (otras entidades físicas y no físicas) a través de una relación interactiva servicial. Y si habían relaciones de inclusión con toda realidad y ánima en ella personificando todo tampoco se empezó a distinguir y clasificar claramente hasta el surgir del predominio lógico clásico por lo que (un poco menos en el medioevo fuertemente religioso) las explicaciones de estructuras físicas se confundían con realidades sutiles y espirituales.   


Una opción auto destructiva sería extender nuestra ignorancia, aferrándonos a paradigmas insuficientes que sostienen instituciones liberales que un día fueron necesarias y aptas pero que hoy se encuentran en decadencia; aferrándonos a la visión clásica dualista-dicotómica mientras nos complicamos cada día más en un progresivo fraccionamiento global y un posible retroceso en cuanto a la inclusividad lograda, los derechos humanos internacionales y la democracia representativa, la disminución de la muerte por enfermedades y guerras que también llegaron con la modernidad puesto que (a pesar de mi cierto indianismo y sensibilidad posmoderna) no todo fue  malo o destructivo.


Otra opción sería la de abrazar el cambio revisionista de nuestros paradigmas, de nuestras metafísicas y epistemologías, incluyendo la implementación universal de una educación necesaria para entendernos mejor como seres fundamentalmente entrelazados, experimentándonos así por sobre la intuitiva experiencia metafísica de separación adaptada a un mundo físico-clásico con participación humana menos compleja. Y esta últimas sería la opción de crecer y  “despertar” al reconocer otro tipo de intuición metafísica aún más profunda que subsume a la separatista. Esa es la opción de abrazar a toda experiencia como parte del entramado VIVO y VITAL, de lo consciente y de sus energías o cuerpos de expresión organizados en cualquier “pacha” que es “real” para quien lo experimenta.


Sin percatarnos estaríamos en una carrera entre 1) Mantener el estatus quo cada día más disfuncional con instituciones, valoraciones, modas, ideologías, mafias e individuos atrincherándose criminalmente para mantener su identidad y aparente integridad contra “la vorágine de los otros” (o quizás temporalmente aliándose por intereses particulares en un potencial “todos contra todos”) y 2) Educarnos decididamente acerca de cómo la individualidad no puede existir sin la interconectividad que existiría en el corazón intersubjetivo y trans-ontológico de la materia, trascendiendo espacios-tiempos y promoviendo nexos vitales auto-sostenibles.


Informándonos y educándonos seriamente  para lograr generar por nosotros mismos nuevas ideas fundacionales para organizar esta emergente etapa pragmáticamente, generando instituciones entrelazadas como organismos en interdependencia sinérgica y funcional. Y para ello, el desentrañar más acerca de la operatividad de aquella parte del fenómeno OVNI que verdaderamente indica ser de origen extraterrestre y que puede aparentemente “colapsar”, manipular y superar distancias y la ingente cantidad de energía que se requeriría para superar la velocidad de la luz… por supuesto que serviría muchísimo. Incluso, si llegásemos a asumir el nivel de responsabilidad necesaria, podríamos aplicar esta ciencia a tecnologías para obtener energía de manera no contaminante.


Por otro lado, si no nos educamos sobre extraterrestres que ya podrían estar entre nosotros y sobre la conectividad que usan, una interconectividad que – en Teoría Integral – equipara a objetos, sujetos, sistemas de objetos y a la relación entre sujetos, podría haber un desbarajuste mayor y más perdurable en desmedro de la humanidad a largo plazo que el que podría sobrevenir si súbitamente nos enteráramos de forma oficial (hasta donde quieran decirnos) que, en efecto, estamos siendo “visitados” por seres extraterrestres y que a veces interactúan con nosotros de forma semi encubierta según su modo de entender las cosas. El llamado es para entender mejor ese modo de entender las cosas basadas en conocimientos fundamentales a ciencias y culturas que tranquilamente superan distancias físicas y el “paso inexorable” del tiempo. Y debemos educarnos a nosotros mismos aunque nuestros insignes líderes prefieran seguir en la negación, especialmente al verse cada día más enfrascados en acusaciones mutuas a medida que los sistemas políticos y económicos modernos se vuelven más precarios e insostenibles.


La tendencia al caos social o a una “pulsión de muerte” se observa en el aferrarse testarudamente a las intuiciones clásicas que las nuevas aproximaciones integrativas no avalan. La tendencia se observa en ser excesivamente conservadores. El fenómeno OVNI genuino que indica una inclusión y superación del espacio-tiempo es contiguo al reconocimiento de las nuevas filosofías integrativas post posmodernas pues estas también avalan  formas de pensar íntimamente conectivas y post dicotómicas, incluyendo al pensamiento complementario (y con el Tercio Incluido) bajo el cual la  praxis cultural, científica y social anteriormente basada en una lógica bivalente (una lógica afín a un universo donde lo “real” está constituido por objetos separados entre sí y relacionándose extrínsecamente entre s en un mundo clásico) la separación es trascendida.


Algunas de estas principales aproximaciones son el Pensamiento Complejo de Morin, la Transdisciplinariedad de Nicolescu, la Filosofía de la Meta Realidad de Bhaskar y la Teoría Integral de Wilber. Cabe decir que estas aproximaciones también convergen bajo fundamentos comunes y, asimismo, elementos en ellas que se complementan y suplementan. Además de este avance conceptual (o mejor dicho Meta Conceptual), el dominio de la intuición de un mundo clásico tampoco es avalado por diversas ideologías basadas en  interpretaciones de la física cuántica, así como por algunas características (simultáneamente objetivas e intuitivas) del fenómeno OVNI, ni por los fenómenos parapsicológicos, los fenómenos de contacto directo con inteligencias extraterrestres (que a veces se manifiestan físicamente y operan “transdimensionalmente”). Tampoco es avalado por toda una gama de fenómenos “paranormales” (además del mundo vivencial animista-practico de tantas civilizaciones pre-modernas). 


No reconocer lo “multi-existencial” (y que muchos al interior de la ciencia moderna le dicen “ilusión”) como algo que en verdad es real y natural y constitutivo de nosotros mismos es continuar des-adaptándonos y propiciando la tendencia hacia el caos, hacia la pérdida global de estructura las etapa de desarrollo cultural y social parcialmente logrados en favor de la libertad y de la inclusión a lo largo de la historia. Es insistir en que la perspectiva de la separación física es más real y prioritaria que el de la conexión intrafísica que anexa la información, lo mental y lo consciente (lo vivo, lo real y lo ontológico en sí) que permite la manifestación de dimensiones como el espacio tridimensional y el tiempo lineal progresivo.


Aceptar todas las formas de vida relacionándonos con ellas sin diferenciarlas fue una etapa del desarrollo del pensamiento humano y su relación con la vida. Una vez que la diferenciación científica moderna hiper diferenció lo subjetivo y espiritual de lo objetivo y material (casi divorciándose por completo de lo primero) ganamos en conocimientos de la función y estructura del mundo físico, nos liberamos de fórmulas de poder arcaicas sustentadas en teocracias pero nos divorciamos de nuestras relaciones internas con la existencia física y no física  y con otros seres interactuantes pero no limitados al mundo físico. En la integratividad post posmoderna que se busca reconocemos que cada etapa de desarrollo fue necesaria pero consideramos que todas ellas son simultáneamente importantes ya que ninguna podría existir sin la otra. Todas las ideologías, cosmologías, sabidurías, prácticas y métodos esenciales deberían valorarse y nuevamente “hacer las paces” con lo que es real pero no necesariamente limitado al mundo físico. La propuesta integrativa nuevamente acepta de forma natural las relaciones vivenciales entre todo lo que es.  



Debemos reconocer la posibilidad de interactuar con múltiples mundos y realidades. Distinguir e interactuar. Y justamente lo muy extraño (lo más “alien”) sería parte de aquello importante que hemos ocultado de nuestra propia psique colectiva algo que necesitamos reconocer porque, a pesar de posiblemente haber estado con nosotros por lo menos desde los años 40 del siglo pasado (y muy probablemente desde nuestros comienzos humanos en la Tierra) es todavía demasiado irrisorio, ficcionalizado o rechazado. Pero es necesario empezar a vernos ocupando un subconjunto de vida dentro de otro, desde una perspectiva cósmica más amplia para poder cambiar “ver hacia adentro” de lo que valoramos y de forma más fresca las premisas sobre las cuales sustentamos nuestros sistemas políticos, económicos, científicos y axiológicos. Por eso, justamente aquello fuera de nuestro mundo pero que se “asoma” un poco y nos observa hasta la interacción semi-encubierta sería (desde una perspectiva basada en el pensamiento de KURT GODEL) necesario para entender las premisas de nuestro sistema y re-constituirnos más cerca a  una realidad basada en la participación intrínseca que trasciende e incluye al ya muy limitante pensamiento lineal y a la causa - efecto lineal. Pienso que lo que más nos parece un “otro” irrisorio, atemorizante y extraño posiblemente sea lo que más necesitamos incluir con un sentimiento en armonía con la razón bivalente subsumida por la razón integrativa mientras nos ilustramos conceptualmente con meta aproximaciones progresivamente más adecuadas.